Guía de Virus Respiratorios
La guía sobre virus respiratorios es una herramienta esencial para comprender cómo prevenir y manejar enfermedades como la gripe, el resfriado común y otras infecciones respiratorias. Leer esta guía es crucial, ya que proporciona información actualizada y recomendaciones prácticas para reducir la transmisión de estos virus, proteger la salud personal y comunitaria, y mejorar la respuesta ante brotes epidémicos. Conocer y aplicar las medidas sugeridas en la guía puede ayudar a mantener un entorno más seguro y saludable, minimizando el impacto de estas enfermedades en nuestra vida cotidiana y en la sociedad en general.
Mejor ventilación = reduce el riesgo de infecciones respiratorias
Mejorar la calidad del aire en espacios cerrados mediante una mejor ventilación o la filtración del aire interior es crucial para reducir el riesgo de infecciones respiratorias. Se pueden emplear varios métodos simultáneamente para optimizar la ventilación en áreas interiores. Una táctica efectiva es abrir ventanas y puertas para maximizar la entrada de aire fresco y minimizar la concentración de partículas virales. Los CDC aconsejan limitar el uso de espacios cerrados y preferir espacios abiertos bien ventilados durante actividades que involucren a muchas personas. La filtración del aire es otra medida útil; si su hogar cuenta con un sistema de calefacción, ventilación y aire acondicionado (HVAC), asegúrese de que funcione continuamente con filtros plisados y reciba el mantenimiento adecuado. Los sistemas HVAC de edificios deben cumplir al menos con los requisitos mínimos de ventilación de aire exterior según los códigos de diseño, y los CDC sugieren que el aire interior se renueve completamente al menos cinco veces por hora, utilizando filtros de aire MERV-13 o de mayor eficiencia sin afectar negativamente el rendimiento del sistema.
Otras recomendaciones incluyen:
• Utilizar purificadores de aire portátiles con filtros HEPA adecuados al tamaño del espacio.
• Encender los extractores de aire del baño y la cocina al recibir visitas y durante una hora después de su partida.
• Emplear abanicos para mejorar la circulación del aire, ubicándolos cerca de ventanas abiertas y apuntando hacia afuera, sin dirigir el aire directamente hacia las personas.
• Limitar la cantidad de visitantes y el tiempo que pasan dentro de la casa.
• Mantener las ventanas abiertas cuando sea seguro al usar vehículos de transporte.
Estas estrategias deben ser evaluadas y adaptadas a cada entorno específico. Para más detalles sobre ventilación y filtración, visite las páginas de los CDC o consulte a un experto en sistemas de ventilación y filtración.